lunes, 9 de julio de 2012

El Soprendente Hombre Araña: 500 días de Spidey



Hablemos de tradiciones comiqueras. Cuando en los 60 Stan Lee, Kirby, Ditko, Trimpe y los demás crearon lo que hoy conocemos como el universo Marvel, la distinción inmediata con lo que eran los “grandes superhéroes” de la época (lo que hoy conocemos como el universo DC) era que había algo oscuro, problemático acerca de los personajes de Marvel, mientras que los de DC era más tradicionalmente heroicos e invencibles.
Tal vez la única excepción era el Hombre Araña, que más allá del angst adolescente de Peter Parker, siempre fue un poco más liviano, un poco más colorido y frecuentemente chistoso. (se puede discutir que la excepción DC era Batman, pero el Bats “realista” no apareció hasta casi 10 años después).
Hablemos ahora de tradiciones de películas comiqueras. Entendamos por tales a las que tienen un momento -1 con las pelis originales de Superman, un momento 0 con las Batman de Burton y Schumacher y que empiezan propiamente dichas con X-Men en los 2000. Más allá de que no hayan envejecido bien, había una intención oscura en las dos primeras Batman, algo de acercarse a ese oro en polvo que eran las reinvenciones de Frank Miller sobre el caballero de la noche. Esto sería mucho más así en las de la serie de Nolan que vendrían unos años después, con el pináculo siendo The Dark Knight (veremos si se superó a si mismo en un par de semanas).
Por el contrario, las películas de Marvel tenían un elemento más luminoso, algo más liviano e incomplicadamente “wow”. La muestra más clara de esto fueron las películas de Sam Raimi de Spiderman, continuó en el tono explosivo de Iron Man y logró su pináculo hace unos meses con Avengers
Pero, ya cuando estábamos en la cresta de la ola Avengers, se había empezado a promocionar este relanzamiento del Hombre Araña, y desde el primer avance estaba claro que estaban apuntando a algo más... ¿realista? ¿oscuro?, digamos por lo menos “diferente” de lo que había venido antes. Era irónico estar preparándose para el efecto “todo sonrisas” de Avengers pasando primero por los trailers “booh-hoo” del nuevo Spidey. 
La pregunta era, ¿En que tradición se ubicaría esta película? ¿En la de las nuevas de Marvel, cómo continuación lógica -o antecesora lógica- de las de Raimi, u otra cosa?
Bueno, después de verla, creo que la tengo que poner en línea justamente con el “momento 0”, con las películas de Burton, con todo lo bueno y malo que eso significa.
Mucho de esta película remite a aquel intento primitivo: el elenco multiestelar (salvo el protagonista), el “traje realista”, el atar el origen del personaje con el villano de turno, la novia rubia, el malentendido policial. Y también un par de las dos peores cosas que nos dejaron aquellas películas, que a diferencia de la clave señalada para Avengers: pongan a alguien que entienda el material a dirigirla o al menos escribirla, va en la dirección opuesta: pongan a alguien que nunca leyó una historieta en su vida en la dirección.
¿Cómo nos damos cuenta de esto? Fácil. Si alguna vez leyeron un comic de súper héroes en su vida, saben que si hay una identidad secreta, SE TIENE QUE MANTENER SECRETA. Y si esto no sucede, sólo pueden ocurrir cosas malas. 
Bueno, en las películas de Batman de la serie original, al momento que aparecía una de las rubias intercambiables, volaba la máscara. BAM, “la chica” sabe quien es el encapotado. De paso, se enteraban convenientemente un par de personajes más. No hace falta que tire más spoilers para que sepan cuáles son algunos de los puntos argumentales clave del nuevo Spiderman. 
Señores directores: si tienen un problema con el grado de identificación que puedan lograr entre público y protagonista si el protagonista está enmascarado... rechacen el proyecto. No quieran hacerlo a su idea de como tendría que ser, o escriban un guión original con su propio personaje, que se desenmascare cuantas veces quiera y con quien se le cante. 
Ojo, esto no arruina por completo la experiencia, y la película tiene unas cuantas cosas buenas (y otras irremediablemente malas, vean la lista más abajo), pero es difícil pasarlo por alto, y siendo que todo en la película grita “trilogía!”, es además cavarse un hoyo para las que siguen (a menos que el punto argumental clave que se asocia a Gwen se resuelva en los primeros minutos de la película #2. Cualquier comiquero sabe de que estoy hablando).
De manera menos articulada, revisemos algunos pros y cons de “El sorprendente Hombre Araña
A favor:
  • La edad de los personajes: Garfield y Stone son creíbles como alumnos de secundario, y las penurias de Peter Parker - Nerd son parte del encanto de la franquicia, que si tenemos de entrada Peter Parker - Exitoso fotógrafo de novio con supermodelo, se pierden.
  • Peter como un nerd siglo XXI: si, un nerd puede ser más o menos buen mozo, andar en skateboard, y hasta tener un aire cool por ser bueno para la ciencia. Eso no quita que un bully lo pueda abusar, pero no es el estereotipo nerd salido de una peli de los 50.
  • La edad y la apariencia del tío Ben y, especialmente, la tía May: hoy en día unos sesentones son gente dinámica, que conoce los productos para colorear el pelo, probablemente vayan al gimnasio y saben como operar un teléfono celular. La tía May de rodete blanco que solamente sabe hornear pasteles atrasa 50 años, denme una Sally Field por favor. De hecho, Field y Martin Sheen son dos de los hallazgos de casting de la película.
  • La transformación de Peter en Spidey: cuando se pone la máscara, sale otra persona. El hombre araña siempre fue este personaje jocoso y con ganas de vivir, todo lo liviano que Peter nunca se animó a ser en su vida diaria. Esto está logrado, al punto que para cuando (admitamos, un poco tarde) el Hombre Araña como tal aparece, es hasta un poco chocante lo diferente que resulta de Peter. 
  • 500 días de Gwen: el romance Peter/Gwen, cuando funciona y cuando no, es creíble, y Gardfield y Stone tienen una química que se parte. 

En Contra:
  • Gwen Stacy, súper científica. A ver, 17 años. DIECISIETE AÑOS. De ninguna manera es pasante en ningún lado, mucho menos con acceso a todo, muchísimo menos con acceso a todo después que su supervisor ha sido despedido en desgracia. No. No hay suspensión del descreimiento que cubra esto. 
  • Ya que estamos, Gwen Stacy: super sexy. Ok, entendemos, Gwen es bellísima. Emma Stone es bellísima, no hacía falta que esté toda la película en mini-minis y bucaneras para que lo entendamos. 
  • La escuela científica Prometeus, donde todos tocan cosas altamente tóxicas con la mano, cualquier colado a un edificio con seguridad de avanzada se puede meter en la sala donde se está experimentando con material genético y no hay mejor sujeto de prueba que uno mismo. Acá no hay accidentes, hay boludez. 
  • Todo se relaciona con todo: Querer atar el origen del personaje con el del villano, es un error. Querer atarlo encima con la historia familiar del héroe, un error peor. Y querer atarlo a los villanos que se vienen en las próximas películas, un error FATAL.
  • 500 días de Gwen: es muy claro que Marc Webb está más interesado en los aspectos familiares, románticos y de relaciones en general que en los de aventuras. Respeto eso, pero la franquicia se trata de otra cosa. 

Concluyendo: El soprendente Hombre Araña no es una mala película, y estoy seguro que todo aquel que este virgen de historietas la va a disfrutar mucho. Lo que no estoy demasiado seguro es si era necesaria, si se justificaba el relanzamiento, tan cercano a la trilogía anterior, si no se iba a hacer algo radical. Si quieren ver una buena pelí de súper héroes brillante y ruidosa, Avengers todavía está en cartel. Y si quieren ver una oscura y seria, esperen dos semanas que se estrena la nueva de Batman

6 comentarios:

  1. Me rompe un toque las bolas que quieran relacionar todo con la familia de Peter. Si bien en el universo Ultimate vemos que mal que mal todo estaba ligado con SHIELD, querer "imitar" eso no sirve, no al menos si Sony tiene los derechos de Spidey :P. Aparte de que le saca esa parte interesante que tenia Curt con la esposa y el hijo, como se retrató en tantas ocasiones.

    Más allá de todo, me gusto bastante Andrew Garfield. Esta muy bien en el rol, y sabe tener personalidad y ser bastante llevadero.

    Un Saludo, Gus. Haber cuando te pasas por la Isla.

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    1. Me gustó Garfield también, y las libertades en el origen no me joderían tanto si no fueran por el "todo tiene que ver con todo". Insisto, son cosas de gente que no tiene ningún amor por el material original.
      Después arreglamos visita por línea privada...

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  2. Correcto, en algo diferimos gus, y es que si bien concuerdo en general lo que decís con la película, la veo mucho ... pero mucho, mas madura que el producto Raimi, sin embargo, lo veo con un gran potencial.... es claro que Marvel miro a DC en esta película... la disfrute muchísimo.... gran logro... en lo que diferimos es que me gusta esta mirada real, si se quiere que le da nolan a su batman. o en este caso... Esta reiniciada....un lujo leerte como siempre

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  3. Demas esta decir que entiendo a que apuntas..... simplemente es que yo lo encuentro encantador

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    1. Pero ves? Es ese "encantador" hay algo hasta juegueton, algo de permitirse el disfrute y no que 'tiene que ser en serio'.
      Gracias por leer y comentar!

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  4. agreed.... pero.. asi y todo.... no esta mal que redefinan ciertas cosas..... la historia de Raimi era mucho mas centrada en ciertos aspectos de spiderman de la década del noventa... si me preguntas a mi .. esta versión es mas stan lee friendly.... la saga anterior estaba demasiada apoyada sobre la serie de fox....no esta mal que existan... y me entusiasma seguir esta saga.... por lo demás no es necesario agradecer, siempre un placer a la vista

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