domingo, 30 de junio de 2013

Mis discos favoritos - ABC Lexicon of Love


Mis discos favoritos

¿Qué hace que un disco sea un favorito? Y digo disco, y no álbum, o LP (cosas de antaño), y mucho menos CD, porque la mayoría de estos discos salieron mucho tiempo antes del nacimiento de ese formato musical. Un disco puede ser favorito porque nos gustan casi todas las canciones incluidas en él, porque tiene una producción excelente, porque nos gusta mucho el artista, o por el marco histórico; cuándo lo escuchamos por primera vez y los recuerdos que nos trae. Todas esas cosas hacen a un disco un favorito, y cuando pienso en mis discos favoritos, pienso en todas estas cosas. 
Quiero aclarar que no tengo un orden o chart en mis discos… sinceramente no puedo decir que uno es más favorito que otro, no puedo hacer un top 10 (ó 100). Claro que los post van a ir apareciendo en orden, pero este será arbitrario, no coincide con ningún orden de preferencia de los discos comentados.
Dicho todo esto, empiezo hoy con un disco que me encanta, y que desde la primera vez que lo escuché se convirtió en un favorito… no es extraño, ya que cuenta con todas las características antes enumeradas para serlo.

Lexicon Of Love – ABC Por Pablo
En primer lugar, quiero, una vez más, agradecer a mi editor por cederme un espacio en su blog; por su buena voluntad y aliento.
ABC es una banda británica que nació a finales de los 70´s, aunque su primer simple, “Tears are No Enough” apareció en 1981, y su primer disco, el que nos ocupa, en 1982. ¡Y qué simple, y qué discazo! Según Wikipedia, es, o fue, una banda New Romantic, pero yo no coincido mucho con eso… creo que existe una tendencia a considerar a las bandas que nacieron por esa época New Romantics, simplemente porque no se puede catalogar su música cómo Disco, Rock, Punk, etc. Creo que esa calificación se basa más en la estética que en la música per se. Además, es importante tener en cuenta que ABC fue cambiando tanto su música, como su estética a través de los años… nada tiene que ver con el New Romantic la estética (o música) de How to Be a...Zillionaire! 
Si bien su primer simple tuvo un éxito moderado (Top 20 en el Reino Unido), el disco llegó a número 1, y es considerado como uno de los 100 discos favoritos de los críticos musicales británicos (42 en el "Top 100 British Albums" del “The Observer Music Monthly (Junio 2004) y 40 en el “100 Greatest British Albums" de la “Q magazine” (Junio 2000), por ejemplo).
Una de las cosas que hace a este disco tan especial, apreciado y, para mí una obra de arte, es la impecable producción de Trevor Horne, además de la orquestación de Anne Dudley y la programación del Fairlight CMI por JJ Jeczalik (para los que no le suenen ninguno, o algunos de estos nombre, estamos hablando de los que luego serían Art of Noise!, y el sello ZTT). 
Lo más notable de esta banda es que ha sobrevivido, con mayor e menor éxito, cuatro décadas, y los “chicos” siguen tocando en vivo, y en 2008 sacaron un nuevo disco. De hecho, en 2009, presentaron este disco (Lexicon) completo en el Royal Albert Hall (Londres), con la BBC Concert Orchestra conducida por la misma Anne Dudley, y la participación especial de Trevor Horne; y en 2012, con motivo de su 30 aniversario en el Theatre Royal Drury Lane, también con Dudley conduciendo esta vez la Southbank Sinfonia Orchestra.
El disco abre con un preludio orquestal que deviene en el ritmo casi Disco de Show Me, y con la estrofa que define, de alguna manera, todo el contenido del mismo: “Once I needed your love, but that was just one thing left on my mind”. Si bien, supuestamente, no es un disco conceptual, la “trama” del mismo es la del amor-desamor, encuentro-desencuentro, con frases hermosamente dramáticas cómo: “I thought you loved me, but it seems you don´t car”, “I care about you, I can never love you”, o “Martin, may be one day you will find true love”. Una anécdota divertida es que Martin (Fry, vocalista del grupo) cuenta en varios reportajes que la gente aún hoy día le pregunta por la calle si ha encontrado el amor verdadero…
Destacan los simples  "All of My Heart", "Poison Arrow", y "The Look of Love (Part One)", qué llegaron todos al Top 20 del Reino Unido; así como sus videos.
Un hecho curioso es que si bien ninguno de los integrantes de la banda, y compositores de las canciones son gay, el disco puede considerarse uno de los más gays de la historia, junto a cualquiera de Donna Summer, Gloria Gaynor, o Boy Geroge.

Eso, una obra de arte que sigo escuchando asiduamente. Para los que no lo conocen, recomiendo que lo escuchen, y si se quedan con ganas de más, sigan con Alphabet City (1987), que también es una joyita de disco.
Lexicon Of Love – ABC Por Gus
Cuando Pablo me propuso usar el blog para publicar los comentarios de sus discos favoritos, sabía que me iba a pasar: verán, con Pablo pasamos juntos los años clave de la adolescencia, donde se marcan a fuego los gustos, especialmente en lo musical, así que probablemente entre su lista de discos favoritos y la mía va a haber un 95% de coincidencia. Por lo tanto, durante esta serie (porque efectivamente, es una serie que se viene, para llenar el tiempo de ambos ahora que terminamos nuestras respectivas cursadas), en algunas ocasiones me voy a tomar la libertad de hacer mi propio comentario de algunos de los discos.
Y me es imposible no hacerlo con Lexicon of Love. Como lo expresa Pablo, y como ya lo he expresado yo en algún otro lado en este blog, yo soy del tipo de fan de la música que sigue productores, y primero, lejos, en mi lista, está Trevor Horn. Y Lexicon of Love es donde empezó todo, no porque sea el primer disco que haya producido, sino que porque fue el primera que “suena” a producción de Trevor y que contara con las clásicas colaboraciones que marcarían los años que seguirían: Anne Dudley, JJ Jeczalik, Stephen Lipson y los demás.
De todos modos, mi primer acercamiento a ABC y este disco, fue indirecto: una nota en la clásica revista Pelo que mencionaba la “nueva ola” de bandas desprendidas de lo que aun no se terminaba de identificar como New Romantic. Estaban Duran, Culture Club, Depeche, Kajagoogoo (?) y ABC. Y lo intrigante era el foco sobre las letras del disco Lexicon of Love, que supuestamente eran una versión irónica (oh, nosotros y los consumos irónicos...) o sarcástica de las clásicas canciones de amor. Cómo en muchas otras expresiones que podríamos agrupar como camp, es difícil identificar hasta que punto  era un efecto de comentario irónico planeado, o sinceramente Martin Fry y compañía en realidad querían hacer el más excesivo álbum de cierto tipo. Claro que si decimos “exceso” y agregamos “Trevor Horn” tenemos una bomba. Exceso en el supuesto sentimiento de las letras, exceso de producción, exceso en el vestuario dorado de los músicos... y nada tan excesivo como la introducción orquestal de Show me que abre el disco, con un opus/fanfarria hecho de manera completamente seria, no con un sintetizador que “suena como”, sino con la toda la orquesta, cuidadosamente arreglada para generar ESE efecto. Brillante como es todo el disco, nada se equipara con esos 30 segundos, y su coda The look of love (part four) que cierra el disco (existe una clásica cara B, disponible también en las reediciones en CD de Lexicon que se llama Overture y que junta estas dos partes con otras orquestaciones, adelantándose efectivamente 10 años a un experimento similar de los Pet Shop Boys, no casualmente otros que han colaborado extensivamente con Trevor).
El disco tiene todos los singles clásicos que se han escuchado mil veces, pero a diferencia de muchos otros discos de la época, funcionan mejor en el contexto del álbum que como piezas separadas. Lexicon of love es, si somos pretenciosos, un ejercicio estético, y si nos ponemos mas en periodistas de rock, un disco conceptual. No “conceptual” en el sentido que cuenta una historia, sino que tiene un tema central que se recorre, las expresiones de amor exageradas, las del amor adolescente, las de las telenovelas.
El destilado de este disco es la balada All of my heart, que funciona como el más perfecto resumen de todo lo que Lexicon tiene para ofrecer. 
Como para redondear, y muy de la época también, el disco se acompaña de un video de larga duración que se llama Mantrap, que pone las canciones del disco en el contexto de una ficticia película negra de detectives. También buscable por ahí está el Theme from Mantrap, otro de esos instrumentales que son más Dudley que ABC.
La relación ABC-Horn ahí terminó, Trevor disparado al cielo de Frankie goes to Hollywood, y ABC con el feo tropezón que fue su segundo disco Beauty Stab. Tendrían oportunidad de recuperarse siguiendo las lecciones de sus productores de Lexicon: Jeczalik como inspirador Fairlight de How to be a zillonaire y Horn mismo y su elegancia para Alphabet City



lunes, 24 de junio de 2013

Comentario: Mad Men 6x13 - In Care of

"It's Detroit with Palm trees"

"Sincericidio" es un bonito neologismo, intraducible, y que bien podría ser el título de este episodio. El sujeto del mismo es Don, por supuesto y contrariamente a lo que pasó en situaciones anteriores donde zafaba o simplemente perdía a la chica, esta vez hay consecuencias que suponemos duraderas.
Don es un maestro en empezar de nuevo, pero la lógica indicaría que esta vez es serio: sin la chica(s), sin trabajo, sin amigos y veremos si sin hijos, luego de la segunda y final dosis de sincericidio, esta vez, creemos que con intención de empezar la cura en lugar de continuar la destrucción.
Fue refrescante ver que todo tiene consecuencias en este universo, aún para el hecho-de-teflón Don, ya sea cometer una infidelidad, beber en exceso, mentir o sencillamente no aprender a manejar con cambios.
El tema es irse (o “ser ido”) y comenzar de nuevo, y fiel a la historia de la serie, a California, sea por oportunidad (Stan), para escaparse (Ted) o porque no queda más remedio (Pete), todos en contraste con “por la fuerza” (Don). (Tal vez tendría que dejar esto como un comentario al paso, pero ahora escribiendo esto me doy cuenta que quien naturalmente tendría que irse/quedarse en California, Harry, no sabemos en qué estatus está).
Claro que hay acciones-consecuencia para todos ellos, menos para Peggy como bien le dice a Ted. Este fue, indirectamente, uno de los episodios más Peggy-céntricos de la serie y tengo que celebrarlo. Desde su hilarante provocación a Ted, a la consecuencia de esa provocación, al terrible bajón de la decisión de Ted  y culminando con la toma “en el trono” que define claramente su verdadero destino. Desafortunada en el amor, y todo eso... Igual, es notable, como mencionaba antes, tanto lo malo como lo bueno a Peggy la tiene como objeto, no como sujeto. Peggy tomo una sola decisión real en los años que la conocemos, y eso fue irse de SCDP, y ya vimos como le fue. Ahora Peggy, sin la sombra de Don o Ted es de facto el jefe, veremos si tiene la oportunidad de explotar finalmente.
Como el resto de la temporada, el diálogo es con episodios anteriores, en este caso, dos de los mejores finales de temporadas: el de la 1, The Carrousel, y el de la 3, Shut the door, take a seat. El primero fue por supuesto la referencia en la presentación de Hershey’s, el momento profesional más icónico de Don, o como supongo que ahora lo tenemos que ver, el “Viejo Don”, siendo que este es el momento en que todo se cae definitivamente a pedazos. El segundo con todos los movimientos personales y de agencia, la indicación esta vez a Don de que tome el proverbial asiento pero más que nada el ritmo incansable y el humor prevalente, en lo que de otra manera hubiese sido el episodio más emocional y dramático de la serie. (también puede haber sido que siendo la primera vez que veo el episodio en grupo, la comedia resonó de otra manera, y fue muy celebrada, pero aún dicho esto creo que es una decisión creativa, como para mostrar contraste y hacer llevadero algo que si no podría ser simplemente doloroso de ver).
Por lo demás, el desarrollo Joan-Roger pareció agregado para darles algo que hacer; los hermanos Campbell son una porquería, pero se ganaron, de manera indirecta pero con una sabia decisión, al decir de Trudy, la libertad; Bob es peligroso solamente porque sabe explotar las debilidades del prójimo; y la única muerte para Megan es la de su matrimonio (su carrera va a sobrevivir, aunque casi mas se la asesinan) .
Como tiene que ser, Mad Men no es una de intrigas, acción o revelaciones. Es un retrato de gente, época y sus miserias. La única revelación que hubo aquí, nosotros los televidentes ya la conocíamos, solo que ahora también la conocen los SC&P y los niños Draper. Hora de ver que hacen todos ellos de ahora en mas con esto.


Algunas observaciones al paso:
  • La operación “reconstrucción de Betty” se puede dar por concluida. Por primera vez desde que la conocemos, pudo admitir su impotencia, por supuesto que ante Sally. Parecía imposible humanizar a este personaje, como también parecía imposible reposicionar a Don, y sin embargo, ambas misiones fueron cumplidas. Maestría de planificación y de guión.
  • Stan, que tan poco tiene que hacer a veces, fue el motor de muchas de las decisiones en este episodio, con su sincero “Go West”. Espero grandes cosas de la relación Stan-Peggy, ahora que efectivamente van a ser jefa-empleado.
  • Hablando de Peggy, es interesante que los dos hombres clave en su historia (que no son Don), Pete y Ted, ahora van a estar en California. Veremos que hace con esta situación, Peggy se merece no solo el cielo profesional, también el personal.
  • No tuve oportunidad de mencionar a Sally, que una vez más brilló en la piel de la precoz actriz que la protagoniza, desde la llamada telefónica con Don a esa mirada que intercambian en el último segundo del episodio.
  • Y no puedo describirles el momento “ha!” que tuve frente al alias de Sally para comprar alcohol: Beth Francis.
  • Hablando de viejos temas que vuelven, Pete no sabe manejar. Mala idea si estas a cargo de la cuenta Chevy. Bien jugado Bob, bien jugado. Supongo que en LA va a tener que aprender a la fuerza.
  • Este comentario fue escrito gracias  la fiesta que organizaron las creadoras del blog Basket of kisses ( http://www.lippsisters.com/ ), si no lo conocen, mírenlo. Van a ver también fotos de anoche de este servidor y un video testimonial que grabe. Ver el episodio, en New York, rodeado de fans (creanme, por lo menos la mitad de las ciento y pico de personas en esa reunión blogueamos sobre Mad Men) fue genial. Me dieron ganas de armar mis propias fiestas. Cómo se ven viendo el premiere y el finale en grupo el año que viene?
  • Finalmente un gracias enorme a todos los que leen. Estos comentarios son, por lejos, lo mas popular de este blog, y el diálogo que generan supera todas mis expectativas. Nos vemos el año que viene para la temporada final!


jueves, 20 de junio de 2013

Inflexibles, inoxidables, frios: Cineastas de Acero - Sobre Man of Steel


Descargo: Este comentario contiene, por supuesto, spoilers. Empezando con el primer párrafo. Si le molesta, no lo lea.
Descargo II: Soy un lector consuetudinario de comics de DC desde hace aproximadamente 35 años. Crecí con la Mujer Maravilla en TV, vi las películas de Christopher Reeve en estreno, al igual que las Batman de Burton.
Descargo III: Así como hay “gente perro” y “gente gato” hay “gente Batman” y “gente Superman”. Se me puede contar en el segundo grupo.
Descargo IV: Divertida como me resulta The Dark Knight, como ya lo he expresado en otro lado, no me gustan las películas de Batman de Nolan porque básicamente me parece que el autor tiene un importante desprecio por el género de origen (y no me refiero a fidelidad con el material de origen, me refiero a quererse apartar de todo lo que hace que dicho género sea lo que es).

Dicho esto, les propongo un ejercicio de imaginación: en la confrontación final con el Joker, Batman saca una .45, y cual Harry el Sucio le pega un tiro en la frente. ¿Problema solucionado? Sin lugar a dudas. ¿Modus operandi de Batman? Definitivamente no.  Hasta Nolan en su desprecio hay una línea que no cruzó, porque sería hacer definitivamente OTRA película, sobre OTRO personaje.
El jueves pasado se estrenó una película bastante interesante, sobre una criatura alienígena que llega  a la tierra y pone a nuestro planeta en conflicto con algunos sobrevivientes de su planeta natal. Se desata una batalla feroz, que destruye gran parte de nuestro planeta, con víctimas que se pueden contar en los cientos de miles, que a ninguno de los alienígenas involucrados parecen importarles (salvo por una extrañamente inteligente y atractiva terrícola que tiene prioridades especiales). Finalmente, el primer alienígena debe sacrificar a su co-planetario en pos del bien común. Todo filmado en colores muy oscuros, con mucha cámara en mano, actores de carácter que por contrato tienen prohibido sonreír y diálogos donde cada frase es un refrán digno de Narosky. Igual, una película interesante y bien filmada, que muestra de manera ingeniosa y, me animo a usar la palabra maldita, realista, cuáles serían las consecuencias de criaturas con esos poderes sueltas en el mundo real. ¿Es esa una película de Superman? Definitivamente no.
Y mucho peor, ¿es esa la película que fije el “tono” para lo que va a ser la franquicia de los héroes de DC en el cine de aquí en más, a la manera que Iron Man lo hizo para el universo Marvel? Muchísimo menos.
No puedo decir que Man of Steel no me gustó. Me resultó entretenida, en líneas generales bien actuada, con algunas ideas ingeniosas, una de las mejores representaciones de superpoderes en pantalla (es la primera vez que vemos las consecuencias del poder más devastador que tienen los kryptonianos: la supervelocidad), una Lois Lane que finalmente le hace justicia a su carácter de “la mejor periodista del mundo” (pista: le toma menos de 24 horas hacer la conexión criatura alienígena-familia Kent-Superman), y una Martha Kent que logra mostrar que es lo que humanizó al bicho extraterrestre.
También es una película con diálogos improbables e increíbles, con un padre que es un fantasma que nos hace preguntarnos para que explotamos el planeta de origen si este señor es perfectamente consciente y funcional; y otro padre que más allá de proteger a su hijo toma una de las decisiones más idiotas de la historia, costándole la vida.
Es también una historia que con toda su moralina, no se toma el trabajo de mostrar las consecuencias reales de todos los desastres que de manera tan detallada nos insiste en mostrar, y que les puedo asegurar, no van a ser retomadas en la ya autorizada segunda parte. Ni las consecuencias psicológicas de la decisión moral mayor (y no me vengan con qué y cuándo pasó en el comic, ya les tiré mis credenciales de entrada, ya sé que pasó en el año 88. También conozco el AÑO ENTERO de historias que siguieron mostrando las consecuencias, incluyendo un exilio y comportamiento esquizofrénico).
Esta película carece de corazón y humor, intentándolos reemplazar con supuesta “inteligencia” y “realismo” tomados con unas pinzas como para agarrar isótopos de kryptonita radioactiva. Y cuando digo “humor” no digo “chistes”, digo “no tomarse todo tan en serio”. No quiero a Lex con peluca y una bimbo acerebrada al lado, ni a Clark Kent comportándose como Tony Stark. Me refiero a alguien en algún momento sonriendo y que no sea con lágrimas en los ojos; alguien que, ya que se sobre abusa de las imágenes religiosas, tenga un momento de revelación, de iluminación, de goce, de alegría que no sea por “uff, menos mal que sobrevivimos a esto”.
Puedo bancar mucho de esta película, mucho más de lo que creía cuando leí por primera vez que Snyder, Nolan y el ladrón de gallinas Goyer iban a ser los responsables de hacerla. Pero no puedo aceptar el último cuarto de la película y sus implicaciones, para la película misma, para la serie de Superman que aquí se abre, y para lo que es el futuro del universo cinematográfico de DC. Y lamentablemente, no me tendría que sorprender, no es más que una extensión de todo lo que DC viene haciendo los últimos diez años, pareciera que intentando alienar a toda una generación (¿generaciones?) de fans.

Algunos comentarios al paso:
  • Excelente casting a todos los niveles. Cavill nació para hacer este personaje (si solamente lo dejaran sonreír un poco), muy bien los dos padres aunque el guion les haga hacer y decir pavadas, brillante Diane Lane como Martha Kent, el único personaje en 3 dimensiones de la película. Tengo algunos problemas con Amy Adams, nomás porque me parece que no tiene la coloratura que esperaba, pero el personaje de Lois está tan bien escrito que es perdonable.
  • Excelente idea poner como rivales iniciales a gente con el mismo nivel de poder imposible de Superman, así no hay que recurrir a recursos tontos (igual algunos hay)
  • …lo que nos hace anticipar a Lex para la peli que viene de la misma manera que anticipamos al Joker en la segunda de Nolan.
  • En algunos años nos vamos a dar cuenta de la influencia real que ha tenido Smallville en los mitos de Superman, en muchos casos, sorprendentemente, para bien.
  • Emil Hamilton, Steve Lombard, Dev-Em… leer los créditos del cast fue más divertido que mucho de la película propiamente dicha para este viejo fan.
  • Faora kicks ass. Voy a dejar para algún otro autor el comentario de género, pero suficiente con decir que es una villana, claramente mujer, con las mismas motivaciones que cualquier villano varón. No sexualizada, no kinky, no traicionando todo porque se calentó con un tipo. Bien ahí.



martes, 18 de junio de 2013

Comentario: Nurse Jackie 5x10 - Soul

"Hi, my name is Jackie Peyton and I'm an addict"

Tengo algunos sentimientos ambivalentes sobre este final de temporada de Jackie.
Si fueron leyendo cada uno de los que hice semana a semana, saben que mi balance es positivo: una serie que se podría haber dado por muerta, o al menos por cerrada, tiene un renacimiento justo a tiempo, apenas retocando algunas de sus premisas básicas.
Jackie Peyton es un personaje complejo, tanto como cualquiera de sus camaradas masculinos que se llevan todas las palmas, los Don, Walter o hasta su “ex” Tony. Queremos quererla, y ella misma lo hace casi imposible, por lo que es tan fácil simpatizar con sus hijas, su ex marido, su ex amante, algunos de sus compañeros de trabajo. Justo cuando estamos a punto de perdonarle todo, se manda una... vaya una que se manda. Eso la hace interesante, tridimensional.
Pero también es cierto que a veces Nurse Jackie, la serie, no está a la altura de Jackie Peyton, a veces por motivos externos mismo a los creadores: el año pasado, sin saber si era o no la última temporada, la serie tuvo un cierre, un cierre casi perfecto. Este año, volvió a pasar lo mismo, sólo que se tomaron un par de libertades “por las dudas”: esa decisión final de Jackie puede ser un final, o un volver a empezar. Podría haber quedado como el más abierto de los finales, en su lugar, es un “continuará”. Al mismo tiempo, hay un tropo que vuelve, el de “santa Jackie” (en serio,vuelvan a mirar el final de la temporada anterior y este... con sus ligeras diferencias es exactamente la misma imagen), que perdonenme por no estar al día con mi catolicismo, pero no me cierra. ¿Qué es Jackie? ¿una mártir? ¿la que paga por nuestros pecados? No entiendo. 
Lo cierto es que ahora nos dejan con las ganas de más, pero también con un poco de ... fatiga. Veremos si la temporada 6 puede poner eso que hace falta para mantener nuestra atención o si la serie ya saltó sobre el tiburón y no nos dimos cuenta.

Algunas observaciones al paso:

  • Roman. ¿Todo para llegar a esto?. Una pérdida de tiempo.
  • La aparición de O´Hara no pudo ser más trucha. Una lástima.
  • Zoe es el único personaje al que se le permite crecer en este programa. Es como la Pete Campbell de Jackie: la única que aprende las lecciones en lugar de repetir el mismo ciclo una y otra vez.
  • Dicho esto, si algo que se repite es SuperGloria rescatando una situación irrescatable, puedo vivir con eso.
  • Este episodio finalmente le da una historia propia a Thor, uno de mis personajes favoritos de la serie, por un montón de motivos. Espero que el año que viene Stephen Wallem tenga su nombre en los títulos principales, como corresponde, y no como un “invitado”, lugar al que quedó relegado por ser el hermano de una de las productoras ejecutivas y creadoras del programa que quería evitar la apariencia de nepotismo. 
  • Gracias a los pocos que leyeron estos comentarios cada semana: Jackie claramente no es muy popular y es la columna regular menos vista de este blog. De todas maneras, la escribo más que nada para mi, y para los 5 o 6 que se que me están leyendo y me lo hacen saber. 

lunes, 17 de junio de 2013

Comentario: Mad Men 6x12 - The quality of mercy

"Lee Garner Junior once asked me to hold his balls"

Hay personas, o personajes, tan desagradables, que aun cuando actúan dentro de la razón, no podemos más que detestarlos.  Mad Men ha elevado esto a una forma de arte, especialmente con dos de sus protagonistas más notables: Don y Pete.
Y no estoy diciendo que Pete “Sangre azul” Cambell  y Don “Monstruo” Draper tengan toda la razón o que apruebe de sus métodos, pero si digamos Ken o Joan hubiesen hecho lo mismo con Bob y Peggy respectivamente, hubiésemos asentido silenciosamente. Porque asumámoslo, en distintos planos, pero tanto Bob como Peggy (y Ted) están en falta, y lo saben y nosotros lo sabemos. Las humillaciones que sufrieron no son más que productos de sus acciones, y en ninguno de los casos, para bien o para mal, hemos visto el final de estas historias.
Obviamente, lo que nos hace reprobar de Don y Pete aparte de su desagradable estilo personal en general, es que ambos además se las ingeniaron para hacer que estas humillaciones de sus némesis les traigan un beneficio personal de algún tipo.
Empezando con Pete, por primera vez lo vemos negociando de manera astuta, navegando el mar de tiburones sin matarlos, simplemente haciéndolos jugar en su beneficio. Primero con Ken (pobre Ken… ese muchacho no gana para sustos esta temporada) para conseguir la cuenta Chevy, y luego, claro, con Bob. Volviendo a la fuente de las temporadas anteriores, la motivación, el motor de las acciones de Pete es lo que oportunamente descubrió sobre Don y que en su momento no pudo capitalizar, seguramente por inexperiencia. Pero Pete ’68 es un cínico de primera línea, y no va a volver a caer en esa trampa. Es interesante que ahora cree poder usar  a Bob, porque sin lugar a dudas le da crédito a Bob para ser un Don junior. No sé si lo está sobreestimando, la sexualidad de Bob en ese contexto histórico probablemente sea un obstáculo (Don se hubiese casado con una rica heredera, Bob simplemente se transformó en un “manservant” con toda la polisemia que tiene la palabra en ingles más allá del simple ‘sirviente’). Igual, tan mal no le ha ido. Mientras tanto, Bob, dejá de sonreír y traeme un café.  
Lo de Don es bastante más retorcido. Pongamos a un lado que su reincidencia alcohólica y alejamiento de Megan son producto del conflicto con Sally la semana pasada. Don ya se había dado cuenta, a su manera, de que la relación de Peggy y Ted era algo más que profesional, pero también ellos eran mucho más discretos, y si hay una infracción de este par, es justamente haberse puesto tan claramente en evidencia, dejando todo profesionalismo de lado. Sus risas y toqueteos ya eran bastante molestos (especialmente para un Don frustrado después del Sallys-interruptus con Sylvia la semana pasada), pero cuando además le ponen la mano en el bolsillo, Don usa todos los recursos que se le presentaron para actuar (interesante como la secretaria de Ted cuyo nombre se me escapa y Joan de alguna manera son un respaldo tácito a sus acciones) y hace una doble estocada, todo por “el bien de la agencia”, tanto con Sunkist (puñalada a Ted) y la campaña de las aspirinas (puñalada a Peggy).  Peggy se queda con la última palabra, “monstruo”, y Don con su cara de dolido, pero lo cierto es que esa relación parece irremediablemente dañada y no estoy muy seguro que tendría que pasar para que se recomponga.
Y tengo la esperanza de esa recomposición, porque realmente me resulta difícil ver a Don arruinar en dos semanas la relación con sus dos “hijas”, la biológica y la profesional de manera tan irreversible.
Lo que si no me esperaba es que la reacción de Sally fuera profundizar sus características Betty-isticas de base, ya sea usando sus poderes sexuales para el mal (involucrando en el medio a Glen, que tendría que pasarle su factura de terapia a los Draper-Francis) o compartiendo un “adulto” cigarrillo con su madre.
Mad Men tiene una tradición de resolver casi todos sus temas mayores en el anteúltimo episodio, en este caso, deja varios temas picando y esperando resolución, la semana que viene se esperan fuegos artificiales.

Algunas observaciones al paso:
  • En algún momento nos enteraremos si entre Ted y su secretaria alguna vez pasó algo, o ella simplemente esta ‘enamorada del jefe’, pero las interacciones que tuvo con Don y, especialmente, con Peggy, fueron geniales.
  • ¿Están intentando apuntar en la dirección de más Don-Betty? No estoy seguro que sea una buena idea, pero debo admitir que ese diálogo telefónico me hizo sonreír.
  • Superpoderes de Sally Draper para luchar contra las mean girls: conseguir chicos, cigarrillos, porro y saber hacer cocteles. Infalible.
  • Hablando de las mean girls: hay un tono entre líneas de SM que ronda varias historias aparte de esta versión de jardín de infantes de una “iniciación”. Esta la complicada (y complicándose cada vez mas) disputa de poderes entre Pete y Bob, y claro, los jueguitos de Don con Sylvia (y con Megan el año pasado, y con algunas putas genéricas la anterior).
  • ¿Qué es mas creepy, el regreso de la escopeta de Pete o que Clara su secretaria parezca saber tanto sobre escopetas?
  • Para pensar: miren el peinado de Glen y el peinado de Bob. Ahora tengan miedo.
  • Cosas de las que puedo prescindir:
  • Hablando de la semana que viene, por cuestiones varias, probablemente no vaya a poder hacer el comentario semanal. Voy a intentar ver el episodio en vivo y twittear algunas reacciones, y escribiré el post cuando este de vuelta.

viernes, 14 de junio de 2013

Clásicos para mi: Hawk and Dove (1988)


Clásicos para mi es una sección que busca rescatar aquellos comics que pueden no tener el consenso universal, pero que para uno merecen ser destacados. 

Contexto:
Hawk and Dove siempre fue uno de esos conceptos que si bien suenan bien en papel, son difíciles de realizar: dos personajes en los polos opuestos del espectro "guerrero/pacifista", tal vez tenían sentido a fines de los 60 cuando los crearon. Para los 80, la solución fue matar a Dove y dejar a Hawk suelto como un hiperviolento de ultra derecha, justo lo que los años Reagan necesitaban. Pero el concepto se llamaba Hawk AND Dove, y la misión que le dieron al matrimonio de Karl y Barbara Kesel fue "creen un nuevo Dove". O en este caso, una nueva Dove. Adicionalmente: Rob Liefeld aún no era sinónimo de todo lo que está mal en el mundo del comic.

Hawk and Dove (1988) Miniseries:
Los Kesel deben ser de la gente menos apreciada en su trabajo como guionistas. Karl era uno de los entintadores líderes del comic norteamericano, y Barbara una astuta editora en compañías independientes y para DC. Con la misión antes mencionada, decidieron no solamente crear una nueva Dove, sino también un universo completo para los personajes, que incluía un refinamiento de su origen, una justificación sobre la muerte de Don Hall, el primer Dove y un variado elenco de personajes secundarios.
Esto también requería recuperar a Hawk-Hank Hall como un personaje funcional y no solo un psicótico ultra violento. Y ese es el punto de partida: el ya peligroso Hawk se cruza con alguien vestido como su hermano Don cuando era Dove... pero se trata de una chica. Su primera reacción es de furia, pero casi sin quererlo, terminan trabajando juntos, con la dinámica complementaria que alguna vez había tenido con su hermano. Los primeros números son un seguir a Hank y su razonamiento de torpe detective para decidir quién de los tres nuevos personajes femeninos son su "nueva compañera": su potencial interés amoroso Ren, la engreída Donna o la brillante Dawn (los nombres no son casuales: Donna y Dawn son versiones femeninas de Don; Ren, aparte de sonar a nombre de pájaro -Wren- es la que se comporta más sospechosamente). Finalmente el misterio se resuelve (spoiler: la nueva Dove es Dawn) y el nuevo dúo tiene que enfrentarse a una criatura MUY parecida a Hawk, Kestrel, que intenta ser el nuevo compañero basado no en las diferencias que complementan, sino en los parecidos que suman.
En el medio, todo el nuevo elenco y nuevo escenario (una ficticia universidad en Washington DC, lugar donde tradicionalmente operaron los Hall, hijos de políticos que también son parte del elenco secundario), y una serie de enredos, algunos humorísticos, y otros sentimentales (¿se supone que Dawn y Hank tienen que ser pareja? ¿O más como hermanos? ¿Y qué tiene Ren para decir de todo esto? Ah, además, en un momento de clásica torpeza Hank le hace saber a Ren que es Hawk), hacen de esta serie un gran entretenimiento, que se lee siempre con una sonrisa.
Ayuda también el encantador arte de Rob Liefeld. ¿QUE??? ¿Liefeld haciendo dibujitos lindos? Efectivamente, antes de transformarse en el destructor de anatomías y buen gusto que asociamos ahora con su nombre, Liefeld era un artista competente, ayudado además por las hábiles tintas de Kesel, que pulen los bordes más ásperos de su dibujo. Guion y arte completan una historieta muy de la época, pero no por eso menos disfrutable.

Contexto posterior:
El éxito de la mini hizo que les dieran una serie regular a los Kesel para los personajes, ya sin Liefeld. Las historias competentes pero sin demasiado brillo, y una serie de artistas genéricos, hicieron que solo durara dos años, finalizando en una de las historias más traídas de los pelos de la época, enganchada con el evento Armaggedon 2001. Tomaría 20 años arreglar ese desastre y para cuando lo hicieron, con Hawk and Dove como  miembros de los Birds of Prey, todo el universo DC fue relanzado.
Liefeld, por supuesto, se transformó en uno de los creadores más populares de los años 90, fundó Image comics, y bajó el estandar de lo que se necesitaba para ser considerado una súper estrella. 
Debido a la popularidad de Liefeld, la serie se editó varias veces en tomo de tapa blanda y se consigue facilmente. No se confundan con la espantosa version 2012, también del amigo Rob, ya sin ningún encanto. 

martes, 11 de junio de 2013

Comentario: Nurse Jackie 5x09 - Heart

"Welcome to to scare-the-shit-out-of-you high"

Tres noticias al paso
  1. Esta semana la cadena Showtime renovó Nurse Jackie para una sexta temporada.
  2. Al igual que el año pasado, los creadores no sabían que tendrían una nueva temporada, así que para ellos el “final” fue el episodio 10 que se emite el domingo que viene en EE.UU.
  3. Jackie Peyton hace 364 días que no consume drogas.


Ninguna de estas novedades nos es indiferente. Por la número 3 es que tenemos una de las temporadas más interesantes de la serie desde probablemente la primera. Esto lleva a la número 1. La número 2 es un poco desafortunada, porque temo que genere un precipitado de historias como pasó el año pasado que obligue a un nuevo relanzamiento el que viene, justo cuando las cosas ya tomaron la velocidad como para despegar y volar muy, muy alto.

Tres argumentos al paso:
A) La relación de Jackie y Frank va tan bien... que Frank se va un poco de boca dejando a Jackie en un lugar bastante incómodo.
B) Grace no sólo es adolescente: es una adolescente hija de una adicta en pleno momento de divorcio de sus padres y con un novio mayor que ella con un rock encima.
C) Las mujeres se le tiran encima al Doctor Prentiss que tiene que hacer la Decisión de Sofía.

La a) es interesante y claramente no se resuelve hasta la semana que viene. No tenemos un equivalente en castellano que tenga el peso que el “I love you” suele tomar en las series y películas, pero con lo que conocemos de Jackie es facil entender porque tiene el freak out que tiene. La b) no tiene una solución ni un cierre prolijo, y eso es parte del realismo que tanto apreciamos de esta serie. La madurez de la charla final entre Jackie y Kevin es otro toque de “adultos” que tan poco o tan mal se suele ver en las ficciones. La c) tiene un final “feliz” supongo, por lo menos para Zoe, poniendo algún tipo de cierre a la relación Roman-Coop, a los dos triángulos que se habían formado con Prentiss en un ángulo, y al cuadrado que estos tres más Zoe estaban formando. No estoy muy seguro si estoy conforme con estos resultados, me gustaba más la relación de respeto/mentoring que Prentiss tenía con Zoe, que podía elevarla de algo más que enfermera. 
Pero de todas maneras, aun nos queda un capítulo, no creo que sea Jackie céntrico nada más.
Un episodio más de una de las temporadas mas satisfactorias de una serie que no es (injustamente) considerada de “las grandes”. Bien hecho, todos, bien hecho.

Algunas observaciones al paso:
  • Tan antipática como me cae, Roman tuvo algunos momentos memorables en este episodio. De quedar el personaje, no me cabe duda que los guionistas pueden transformarla en algo interesante el año que viene.
  • Lo mejor del cuadrado Coop-Roman-Prentiss-Zoe: la imitación de Roman que hace Zoe.
  • Me encanta cuando Gloria pone a la gente en su lugar, aun cuando está de “vacaciones”.

lunes, 10 de junio de 2013

Comentario: Mad Men 6x11 - Favors

"Not all surprises are bad"


Algunos episodios de Mad Men parecen pegarnos con su “tema” por la cabeza, al punto de que como éste, son el título mismo. Y es cierto que la cadena de favores Ted-Don-los Rosen es la propulsora de mucho del argumento de este episodio (cómo también en menor medida la de Bob-Manolo-Pete, pero eso es otro tema), al punto que, junto con la “comedia de enredos” con el manojo de llaves que detona una de las dos súper bombas de esta semana, parece un poco...forzado. 
Y es una lástima, porque en sí, sin entrar en estos detalles, estamos ante uno de los mejores episodios de la temporada, que insisto, muchos insisten en criticar y que yo encuentro sólida como siempre. Porque, también insistiendo, un tema recurrente que encuentro es la mirada hacia el pasado, dando cuenta de que si bien al mirar un episodio de la temporada 1 y otro de esta, podrían ser de series completamente diferentes, no habría hoy sin el ayer. Y de mucho mejor modo que con un flashback innecesario al pasado de Don.
Nos basta lo que sabemos de Don, de Dick Whitman y la guerra de Corea, para entender que más allá del (un poco exagerado) amor que siente o ha sentido por Sylvia, el tema de alguien queriendo evitar la guerra por cualquier medio lo toca de cerca. La motivación superficial, claro, es congraciarse con los Rosen (con Sylvia por su relación, con Arnold supongo que por culpa), pero Don no haría estos movimientos sin su pasado, y de la misma manera que le debe todo a Anna, puede entender la gratitud que acompañaría este gesto.
Claro que el uso que hace Don de esa gratitud es el más barato, y buen lío que le va a traer con su hija (y probablemente esposa y ex esposa) en las próximas dos semanas.
El pasado sin embargo, arremete más que nunca con Peggy y Pete, y esa historia que es tan central a la trama de Mad Men y que funciona tan bien porque en lugar de tirárnosla por la cabeza todo el tiempo, reaparece cuando menos la esperamos. Todo, desde el increíble diálogo entre Dorothy Campbell y Peggy, hasta la maravillosa escena de Peggy y Pete funciona a la perfección. De hecho, tal vez haya sido todo el alcohol que se habían tomado, pero vi verdadera complicidad, hasta verdadero... cariño, me animo a decir entre estos dos. Pete, que su madre insiste era amargo desde chico, también es así porque salvo Trudy, jamás nadie lo ha tratado con un poco de calidez. Y Peggy hace resonar algo ahí, donde nadie más lo puede hacer resonar. La escena de estos dos rankea ya con la de Don y Joan el año pasado entre mis favoritas de la serie toda.
Y claro que esta comedia de enredos no se cierra si no mencionamos como la historia de Pete cierra (o abre) la de Bob, que el secreto que se traía no era de los X-Files si no de Queer as Folk. Pobre Bob, más allá de su discutible gusto en hombres (puaj), sus reacciones ante las palabras “degenerado” y “repugnante” fueron para romper el corazón de cualquier televidente.
Así que las piezas están montadas sobre el tablero para los últimos dos episodios: mientras que gente que claramente no estaba sintonizando el canal correcto creía que las revelaciones vendrían de la mano de agentes del gobierno o asesinatos rituales, en realidad se va a tratar de Don, su hija, sus mujeres por un lado; de Peggy, sus potenciales hombres o su gato, por el otro; y algún tema político de la agencia. Como tiene que ser. 

Algunas observaciones al paso:
  • Hace mucho que no sabemos nada de Pauline Francis, pero estas apariciones estelares de Dorothy Campbell más que la están compensando. Todo el diálogo con Peggy, y las reacciones de Elizabeth Moss fueron la mezcla perfecta de incomodidad y risas, y luego el intercambio en el departamento de Pete terminó de redondearla. 
  • Es bueno ver que en su mínima aparición, la “new model Betty” sigue siendo lo que siempre esperamos. 
  • Si bien la historia de Peggy que rescato es la que se cruza con la de Pete, mucho de lo que aprendimos esta semana sobre la vida personal de Ted es para avanzar con el tema sin cerrar de estos dos (interesante también como Pete les sacó la ficha inmediatamente), al igual que la llamada a Stan (y si hay un flashback que me gustaría ver es a cuando esa relación llegó al grado de madurez que tiene hoy en día, porque nunca lo vimos en cámara), y la final adquisición de un gato. No Peggy, no vayas ahí...mudate de una vez antes que tenerle que dar la razón a tu madre!
  • Una nota final de esas de psicoanálisis salvaje que me gusta tirar de vez en cuando: no es novedad que esta temporada estoy completamente cansado de las historias de Don, pero hubo algo en el episodio de hoy, especialmente en la primera mitad, que me recordó como de la misma manera que Betty siempre fue el modelo perfecto de la histeria, Don lo fue (o al menos lo era al comienzo) de la neurosis obsesiva. No que me haya hecho simpatizar con Don, pero por lo menos entenderlo un poco más y entender a donde apuntan a veces Weiner y compañía.  

viernes, 7 de junio de 2013

Clásicos para mi: Legion of Super Heroes v4 #12 (1990)


Clásicos para mi es una sección que busca rescatar aquellos comics que pueden no tener el consenso universal, pero que para uno merecen ser destacados. 

Contexto:
Pocas cosas son más polarizantes que esta serie de la Legion, también conocida como la "Legion Giffen" o la "Legion 5 años después". Sencillamente se la ama por su complejidad y guiños para el fan, o se la odia por destruir el concepto de la Legion como "futuro brillante" reemplazándolo con una distopía que destruyó la integridad de los personajes.
Transcuyendo "5 años después" de la última historia publicada, muestra a un planeta Tierra colonizado por la raza alienígena de los Dominators, la Legion desbandada, personajes clave muertos o mutilados, otros que traicionaron a sus ideales y otros que simplemente se rindieron. Algunos de ellos no se olvidaron de que se trataba, y estos primeros doce números son un recorrido (con algunas DISCUTIDISIMAS interrupciones debido a mandato editorial) sobre este proceso de reformación.

Legion of Super Heroes v4 #12 (1990 ):
Una de las complejidades de esta serie es como leerla: se puede considerar una larga historia de 39 números, como un montón de historias aisladas,algunas de las cuales apenas guardan relación unas con otras, o como una serie de sagas más cortas que finalmente arman un mosaico mayor.
De un modo u otro, el número 12 completa la idea iniciada en el número 1, pasando de "no hay más Legion", a "tenemos Legion nuevamente". Como en tantas otras locuras narrativas que Giffen y compañía estaban probando (esta serie es definitivamente prueba y error, con especial acento en el error), luego de un breve diálogo entre personajes donde se dan cuenta que, efectivamente, la Legion está de vuelta, sigue esta página, como diciendo, casi un año después de publicarse el número 1 de una serie llamada "Legion of Super Heroes", "aquí es donde comienza la legión nuevamente".

Página a página se van inventariando los statuses de los diversos personajes, desde los heridos a los desplazados en el tiempo, los presumidos muertos y los que están listos para volver a salir a pelear. El foco es en los veteranos, pero también en personajes que parecen aparecer de la nada como Kono, Devlin, Kent o Celeste (que es casi la protagonista de la historia, adquiriendo lo que parece un nuevo poder... que no se aclararía en por lo menos 4 años). También está la confirmación sobre la relación entre Furball y Brin Londo (pista: son la misma persona), la cacería del clásico villano Roxxas y un ataque en el planeta Quarantine, donde aparecen más personajes de los cuales hasta ese momento no sabíamos nada.
Como con toda la serie, el secreto está en relajarse y gozar, no pretender entender todo en la primer sentada, ir saboreando de a poco lo que pasa. En segunda, tercera, DECIMA leída, van apareciendo cosas. Leer una historia clásica del año 69 nos hace entender quien es otra persona, ver una película de ciencia ficción otro día nos hace entender una línea narrativa, poner Watchmen lado a lado nos hace ver dónde Giffen homenajea y donde va en otra dirección. Una vez que se empieza, desde el número 1 o desde este número 12, se los garantizo, no lo van a poder soltar. Y si se quedan con la sensación de que esto no es una historia orgánica, completa... déjenme decirles que 23 años después sigo tratando de entender hacia dónde va todo, y que no está en mis planes abandonar la tarea en el futuro cercano.


Contexto posterior:
La legión siempre tuvo lectores fieles, pero el ruido de fondo con la serie era intenso y alguien se debe haber puesto nervioso, por lo que un par de números después intentaron contar una historia más tradicional, con otro dibujante. Nadie quedó satisfecho y se le permitió a Giffen terminar de contar su polémica historia del modo que quería. Unos años más tarde hubo un intento de tomar los cimientos de esta historia y transformar a la nueva realidad en un título de super heroes típico de los tempranos noventa, pero no dejaba satisfechos ni a los fans de la serie tal como estaba ni a los que pretendían un cambio total. Esto llevó al primero de varios (muchos) relanzamientos de la serie, que nunca volvería a ser la misma, salvo por aislados momentos de brillantez. 

Un dato personal:
Aparte de ser mi etapa favorita de mi serie favorita a cargo de mi creador favorito (Giffen), este número lo compré directamente de la estantería de una comiquería de paseo por New York en 1990, por lo que le tengo un cariño especial. 

martes, 4 de junio de 2013

Comentario: Nurse Jackie 5x08 - Forget it

"I'm going to touch your stuff"

Por todo lo bueno que tiene esta temporada de Jackie, es que con una protagonista un poco menos en problemas que en temporadas anteriores, el foco se puso en los personajes secundarios. Pero como la protagonista sigue siendo Jackie, algunas de esas historias avanzan a una velocidad de caracoles.
Casi cerca del fina - a esta temporada “corta” le quedan sólo dos episodios - es hora de hacer algo con esas historias.
Lo bueno es que encontraron una manera ingeniosa de atar historias muy separadas como la de Gloria y sus problemas de memoria, con la de Prentiss con su falta de ganas de hacer trabajo no médico, con la de la relación de “amigos” de Zoe y Prentiss, y hasta con la inexperiencia/negligencia de Roman. Todo cierra un poco demasiado bien, y creo que tenemos que entender esa última toma de Zoe como que ve algo más que un mentor en Prentiss.
Por otro lado, está la historia de Jackie, que de modo interesante, y enfrentada con las realidades que le trae Frank, tiene que rever como es que funciona, no funciona o podría funcionar mejor su recuperación. Hay un momento tal vez demasiado “he visto la luz” para mi gusto, pero si valió para la intensa escena entre Jackie y Kevin en el bar, está todo perdonado. 
Supongo que con esto tuvieron un cierre todas las historias planteadas en el episodio uno, simplemente para reabrir lo que es el conflicto con Grace. Hace un par de semanas comentaba que las drogas iban a ser la kriptonita de Grace, pero creo que me equivoqué en el como. Rebelión adolescente + la complicada historia de adicciones de su familia + lo que sabemos de sus primeros años de vida= no tendría que sorprendernos, pero es shockeante de todas maneras.
Los próximos dos episodios se llaman “alma” y “corazón”, espero que venga con un cierre si no feliz, al menos esperanzador. Después de todos, no tenemos seguridad si no son los últimos dos episodios de la serie.

Algunas observaciones al paso:
  • Tengo que entender que esta es la redención de Roman. Demasiado poco, demasiado tarde, demasiado poco creíble. Además: pobre Zoe si por ahí pinta romance.
  • La resolución del tema Gloria es un poco anticlimática, aunque me alegro de que no hayan “arruinado” al personaje.
  • Además, como le dio vuelta el argumento a Prentisss... como una maestra. 
  • Anotenme del lado de los que quieren lo mejor del romance de Jackie con Frank. 

lunes, 3 de junio de 2013

Comentario: Mad Men 6x10 - A tale of two cities

"I made the biggest mistake of my life"

Como lo adelantaba la semana pasada, este episodio de Mad Men comparte título con el clásico de Dickens, pero ahí se acaban las comparaciones. Las ciudades Dickensianas eran Paris y Londres, y si bien en una de ellas había una revolución, tratar de relacionar los disturbios de la convención demócrata del 68 que sirven de marco a este episodio seria buscar simbolismos donde no los hay. En su lugar, la segunda ciudad es Los Angeles, que ya tiene toda una historia con Mad Men, desde que Don tuvo su encuentro con el jet set y donde aprendimos los secretos de Anna. También en LA es donde el romance de Don  con Megan comenzó (y donde, del mismo modo que Megan el otro día intento reavivar la relación proponiendo Hawaii, esta vez le toca a Don proponiendo LA y Disneylandia), y donde, como ya mencionamos en otro momento, Matthew Weiner nos quiere contar que se fue la magia de NY a fines de los sesenta.
La historia contada aquí, con todos estos antecedentes, es bastante más liviana que nuestras excursiones anteriores a la costa oeste, y bastante sin consecuencias. Don tiene OTRO episodio alucinatorio bajo las drogas, nuevamente totalmente innecesario, y donde se cruzan fantasías sobre Megan (que más querría Don que una Megan que lo compartiera libremente, dejara su trabajo y quedara embarazada), el soldado del primer episodio de la temporada y la fallida campaña para el Sheraton, y realmente, ya que estábamos alucinando en Los Angeles, me hubiese gustado un poco de Anna. Quedará para otro episodio…
Lo interesante, para mí, esta semana, está pasando del lado NY de las cosa, principalmente con la historia de Joan, pero también con otros manejos de agencia que involucran una serie de jugadores que finalmente empiezan a mostrar su jugada.
Cuando un secreto es sabido por todos, pero sigue siendo un secreto, las consecuencias suelen ser desastrosas (podría citar a Freud y Lo Ominoso, pero me lo reservo por ahora). Los hechos que llevaron a Joan a ser socia de la agencia sin nombre (por ahora) son conocidos por absolutamente todos (mas allá de los involucrados, ya está establecido que Ken y Harry lo saben, y esta semana quedo bastante claro que Peggy también), pero a nadie le pesan más en su conciencia que a Joan misma. Y entonces, cruzándose con una oportunidad que realmente no vio venir, le pareció que era el modo de hacer valer su autoridad. Pero Joannie, eficiente como es, no es una persona de cuentas, nunca estuvo en una de esas reuniones donde Roger y Don hacen magia para conquistar un cliente, y no hay Peggy (especialmente si no la dejan a Peggy hacer la gran Don) que pueda remontarlo.
Estas acciones la ponen a Joan en una de las situaciones más públicamente humillantes de su carrera (hemos vivido humillaciones con Joannie, pero siempre eran tras puertas cerradas), siendo retada por Pete, Ted y hasta Peggy. Y contraria a su capacidad de salir airosa, esta vez es Peggy quien le tiende la mano y la salva, al menos por ahora. Duele verla a Joan en esta situación, pero tampoco podemos decir que no se la merecía, especialmente viniendo de Peggy. No me malinterpreten, estas dos mujeres son mis favoritas de la serie, y nada me gustaría más que compartieran más que esos momentos de complicidad brillantes, como el cigarrillo compartido cuando Don anuncio su compromiso con Megan, o hace un par de episodios con el regreso de Peggy a la agencia. Pero también es cierto que Joan ha sabido ser cruel con Peggy, y como es dable a dos mujeres que empezaron como secretarias, tienen BIBLIORATOS  de facturas para pasarse una a la otra.
Y siguiendo con algo que comente hace unas semanas, una serie de este tipo no contrata a un actor con cartel propio, en este caso Harry Hamlin, para tenerlo en segundo plano. Jim Cutler puede parecer otro borrachín simpático a la Roger, pero en cuanto Roger y Don no están, es el que viene a mover la agencia. Puede que Sterling Cooper and Partners sea un lindo recuerdo de tiempos más sencillos, pero ahí se acaba todo. Como varias otras cosas en este episodio, no tenemos una resolución (estamos en cuenta regresiva al final de temporada, después de todo), pero claramente por ahí viene el asunto. Y no contemos con Peter Campbell, el niño que grito “paranoia” para salvarnos: como parecen hacerlo todos en 1968, cuando las cosas se ponen pesadas, la solución es prenderse un fasito.

Algunas observaciones al margen:
  • Aún por resolverse a futuro, definiciones sobre Bob Benson. Más y más, Bob me parece una criatura de los 80 más que de los 60, con su disco de autoayuda, sus cafecitos en taza descartable, y su cultura de trepador. Puede ser que los 80 lo encuentren peleando la realidad del SIDA si las teorías de la internet salvaje y de Ginsberg son ciertas, pero por ahora es demasiado temprano para saber. La matemática da: calculemos que anda por los 25, un cuarentón en los 80 podría cruzarse con Gordon Gekko o los personajes de thirtysomething.
  • Otra referencia a los 80: el ejecutivo de Carnation que considera que Nixon es un blando, no como “Dutch” Reagan…
  • Hablando de Ginsberg, alguna vez dudamos de su salud mental, y medio que esa historia se dejó de lado… hasta ahora. Me parece que más que delirios, “Michael” (no me llames así) tuvo algún tipo de episodio de ansiedad. Vale recordar, que a diferencia de todo el resto del elenco, Ginsberg sigue sobrio.
  • En la lista de personajes que no me esperaba volver a ver y que realmente no necesitaba volver a ver, después de Duck, esta Danny. Perdón, DANIEL.
  • Ante del anuncio de SC&P, Bert se pone en línea con los socios muertos. Bert, basta, los vas a enterrar todos.